Se cierra el agujero en la capa de ozono que había en el Ártico

Se cierra el agujero en la capa de ozono que había en el Ártico

Escrito por: Ildefonso Gómez Herrera    27 abril 2020     2 minutos

El agujero en la capa de ozono que había en el Ártico ya no existe. Aunque se sigue trabajando para que se cierren más.

Los agujeros presentes en la capa de ozono son problemas que han dado muchos dolores de cabeza. Las actividades humanas han provocado la aparición de estos agujeros, los cuales no consiguen filtrar correctamente los rayos del sol y por lo tanto también provocan modificaciones en las maneras de comportarse del planeta. Sin embargo, se confirma que las actividades humanas, junto a un buen concienciamento de la población están ayudando a cerrar algunos de estos agujeros.

El equipo del Servicio de Vigilancia de la Atmósfera de la red europea Copernicus ha confirmado que el agujero de la capa de ozono que estaba en el hemisferio norte, en la zona del Ártico, se ha cerrado. Una excelente noticia y, a la vez, todo un récord.

El hito se ha conseguido gracias a la disolución del vórtice polar, el cual se ha dividido en dos. Esto, junto a la ola de calor que ha existido en la zona durante las últimas semanas, con temperaturas que llegaban hasta los 20º, han propiciado la situación que comentamos.

El agujero podría no estar relacionado con el cambio climático

Aunque en el artículo estamos hablando acerca de la posible relación entre el agujero comentado y el cambio climático, los expertos afirman que en este sentido hay que ser prudentes:

No sabemos por el momento por qué la dinámica fue tan inusual este invierno. Estamos seguros de que muchos científicos harán estudios de modelización para averiguar las razones de esto.

Eso sí, está claro que la consecuencia directa es una mayor exposición a los rayos UV que ha habido en las zonas por las que ha pasado, como Alaska, Groenlandia, y una parte de Rusia.

En cualquier caso, la noticia es positiva debido a que estos agujeros en la capa de ozono pueden dar lugar a males mayores y, por lo tanto, dañar a las diferentes especies de vida que hay en la Tierra.

Vía | The Week

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