¿Y si hubiera animales debajo de la Antártida?

¿Y si hubiera animales debajo de la Antártida?

Escrito por: Ildefonso Gómez Herrera    15 febrero 2021     2 minutos

Investigaciones recientes permiten afirmar que, debajo de la Antártida, podrían existir nuevas especies animales.

Las últimas investigaciones que se están llevando a cabo bajo el suelo de la Antártida están dejando sorprendidos a los expertos. Y es que, ante ellos, se está descubriendo un mundo completamente nuevo. El último estudio del que tenemos constancia ha dejado ver que incluso podría haber nuevas especies animales.

Un equipo de investigadores ha estado recientemente perforando a través de 900 metros de hielo en la plataforma Filchnner-Ronne, situada en el sureste del mar de Weddel, y a aproximadamente 260 km del mar abierto. En esta expedición se ha estado buscando qué hay en la oscuridad, bajo el agua que tiene una temperatura de -2,2 grados.

La primera conclusión que han extraído es bastante fácil de entender: se han avistado seres estacionarios muy parecidos a esponjas, además de otras criaturas totalmente desconocidas, pero que estaban adheridas a una roca del fondo marino.

Los expertos ya se están haciendo bastantes preguntas: «¿Cómo llegaron allí? ¿Qué están comiendo? ¿Cuánto tiempo llevan en el lugar?«. Incluso, se cuestionan acerca de la posibilidad de que sean nuevas especies animales.

Un lugar inexplorado

Antártida

Hay que tener en cuenta que las plataformas de hielo flotantes que se están investigando suponen un hábitat inexplorado, de todos los existentes en el Océano Austral. Su extensión es bastante grande: 1,5 millones de kilómetros cuadrados. Aunque, eso sí, de toda esa distancia solo se han estudiado pequeñas porciones.

Las primeras teorías debaten acerca de cómo estas criaturas han logrado sobrevivir en un entorno tan helado, sobre todo porque, según se incrementa la profundidad, la luz del sol se va haciendo cada vez más mínima. Aparte, el alimento suele venir de arriba, por lo que parece imposible que en el interior de estas aguas llegue comida.

Por otra parte, los investigadores calculan que la roca descubierta, y en la que se encontraban estos animales, está situada a una distancia de hasta 1500 kilómetros de la fuente más cercana de fotosíntesis. En todo caso, se espera que próximamente los investigadores puedan conocer más detalles del descubrimiento que acaban de realizar.

Huw Griffiths, bio geógrafo del British Antartic Survey, afirman que para responder a las preguntas que tienen será necesario «encontrar una forma de acercarnos a estos animales y a su entorno«. Una distancia que está «a 900 metros bajo el hielo y a 260 km de los barcos en los que están nuestros laboratorios«.

Parece que hay más preguntas que respuestas. Se espera que las segundas se puedan conseguir próximamente, cuando las investigaciones sigan hacia adelante.

Vía | EurekAlert
Fotos | FlickR – NASA Goddard Space Flight Center | FlickR – NASA Goddard Space Flight Center

Comentarios cerrados