Los perros agresivos son maleducados, parte 2

Los perros agresivos son maleducados, parte 2

Escrito por: Luis G    13 agosto 2009     2 minutos

Quienes alguna vez sufrimos el ataque de un perro agresivo nunca podremos olvidar ese instante de nuestras vidas. El ataque suele ser tan sorpresivo y repentino que las posibilidades de defensa suelen ser escasas. A veces, estos casos terminan en tragedia. La mayoría de la gente siempre creyó que los perros de ciertas razas agresivas por naturaleza, inevitablemente, tarde o temprano provocarían un ataque; sin embargo, los adiestradores pregonaban que los perros agresivos atacaban porque no habían sido bien educados. Ahora, una investigación les da la razón.

Según un estudio llevado a cabo por la Universidad de Córdoba, España, demuestra que los dueños son los responsables de los ataques por dominancia o competencia de sus perros. El investigador Joaquín Pérez-Guisado expresó que, algunos de los factores que provocan agresividad en las mascotas son: la poca de experiencia del dueño, la falta de entrenamiento básico del animal, el excesivo consentimiento hacia los animales, castrar a las hembras, no tener un objetivo cuando se adopta al perro, no alimentarlo correctamente y no prestarle la debida atención.

Se estudiaron 711 perros mestizos y de diferentes razas como el Bullterrier, el American Pitbullterrier, el Pastor alemán, el Boxer, el Rottweiler, el Dobermann –animales considerados “naturalmente agresivos”- y el Dálmata, el Setter irlandés, el Golden retriever, el Labrador retriever, el Caniche miniatura, el Chihuahua, el Pekinés, o el Bulldog francés –razas consideradas como dóciles-.La mayoría de los perros que se mostraron agresivos eran por motivos de dominancia; sin embargo, para que su agresividad se exprese debía intervenir la incorrecta actitud del dueño. Pérez-Guisado expresó que “para corregir el comportamiento del animal, los amos deben seguir un trato adecuado y restablecer la dominancia sobre el perro».

El investigador español advirtió sobre los castigos físicos, señalando que «esta medida no puede utilizarse con todos los perros debido a la peligrosidad que entrañaría, aunque sí podría ser empleada para restablecer la dominancia sobre cachorros o perros que sean de pequeño tamaño o fáciles de dominar». Además enfatizó sobre que el castigo debe ser siempre para asustar y nunca para infringir sufrimiento al animal. La conclusión que se desprende de este estudio es obvia: quienes deseemos adoptar un perro deberemos ser responsables, asesorarnos con los entendidos, darle la debida atención al animal -que es un ser vivo y no un juguete-, y, sobre todo, nunca alardear con la “valentía” de nuestra mascota.

Fuente | SINC
Vía | Neomundo

un comentario

  1. Bernardo dice:

    ¿A quién se le ocurre poner una fotografía de un Rottweiler en el enunciado Boxer?
    Endiluego…