Los científicos han logrado secuenciar el genoma del lince ibérico y la información obtenida tras este estudio genético confirma las sospechas que se tenían sobre su fortaleza genética. La endogamia y su aislamiento han hecho que este felino sea una de las especies con menor diversidad genética del mundo. El lince ibérico supera incluso a animales tan aislados como el demonio de Tasmania.
A pesar de que parecía que los atropellos estaban dando una tregua al lince ibérico, parece que la especie no va a poder despedirse de 2016 sin lamentar más muertes por este motivo. Un nuevo ejemplar de esta amenazada especie ha sido atropellado en Andalucía, lo que eleva la cifra de linces ibéricos muertos por esta causa a 12. Como mencionábanos, el número de muertes por atropellos parece que disminuye en 2016, aunque hasta que el año no termine no podrá hacerse un balance definitivo.
Los planes de cría del lince ibérico en 2016 han sido fructíferos y han dejado los mejores números de la marca histórica hasta la fecha. Debido a estos excelentes resultados, la comisión de seguimiento del proyecto LIFE Iberlince ha acordado proponer "la liberación de 40 linces ibéricos nacidos en cautividad, entre machos y hembras, para reforzar las reintroducciones de esta especie en la Península Ibérica". De esta forma se pretende reforzar la presencia de la especie en distintas áreas y contribuir a reducir la endogamia.
Aunque en muchas ocasiones se obvie, uno de los pilares fundamentales para garantizar la supervivencia del lince ibérico es el estado de conservación de sus presas, entre ellas el conejo. Estos roedores son fundamentales para los linces ya que constituyen el pilar de su alimentación y a pesar de que históricamente los conejos han sido muy abundantes, distintas enfermedades han ido mermando sus poblaciones de forma drástica a lo largo de los años.
A pesar de que el año 2016 ha sido particularmente bueno para el lince ibérico (Lynx pardinus) debido al incremento de la natalidad en cautividad y al mayor índice de supervivencia de la especie, su introducción en otros territorios peninsulares tiene que ser estudiada con detenimiento. La posibilidad de que el lince fuese introducido en Valencia ha sido rechazada por parte de Miguel Ángel Simón, responsable del programa Life Iberlince, que ha señalado que dicho territorio no se adapta a las necesidades del lince.
Las poblaciones de lince ibérico (Lynx pardinus) se encuentran en un momento "dulce" en el que parece que el mayor peligro ha pasado y las poblaciones crecen a un buen ritmo, cuadriplicando el número de ejemplares respecto a hace 15 años. Esta situación llevo a que en 2015 se rebajase el grado de amenaza que pasó de "en peligro crítico" a "en peligro" según la decisión tomada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Pese a los peligros que sigue afrontando el lince ibérico (Lynx pardinus), y haciendo un balance general, los últimos años están siendo especialmente buenos. Una de las nuevas alegrías que nos da este amenazado felino es que la temporada de cría de 2016 se ha saldado con una tasa de supervivencia del 83 %. Una cifra que recoge el porcentaje de crías de esta especie que ha logrado superar con éxito los primeros 60 días de vida.
Las poblaciones de lince ibérico (Lynx pardinus) repuntan y en los últimos 15 años el número de ejemplares de esta especie se ha cuadriplicado. Unas cifras impresionantes pero que todavía no significan que este felino esté salvado del peligro de la extinción. Poco a poco dicho fantasma va desapareciendo, pero todavía queda un largo camino por recorrer. En total, hay 404 ejemplares censados de los que la mayoría habitan en Andalucía, que sigue siendo el bastión del lince ibérico.
El lince ibérico prosigue su proceso de expansión y reintroducción en la península ibérica. Recientemente ha sido liberado un nuevo lince en Portugal, que se suma a los otros 17 reintroducidos en este país desde 2015 y el quinto en lo que va de año. Mistral es un macho criado en cautividad en el centro de Zarza de Granadilla (Cáceres) y que ahora habita en el Parque Natural del Valle del Guadiana, en la región lusa de Mértola.
Parece que las buenas noticias para el lince ibérico no dejan de suceder en esta primera mitad del año. A los excelentes números ofrecidos por el último censo de la especie en 2015, hay que añadir los nuevos nacimientos que se están produciendo a lo largo de este año. De todos los que se han producido este año, algunos son todo un acontecimiento histórico para esta especie. Sin duda uno de los más significativos es el que ha tenido lugar en los Montes de Toledo, donde ha nacido una camada de cuatro linces, algo que no sucedía en décadas.
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