Espiando el atún rojo del Mediterráneo

Espiando el atún rojo del Mediterráneo

Escrito por: Cristina    26 julio 2010     2 minutos

Actualmente, el atún rojo es la especie modelo de la mala gestión del mar a nivel mundial, siendo los Gobiernos quienes incumplen las recomendaciones científicas para evitar su extinción.

Por este motivo, los científicos utilizando las nuevas tecnologías están estudiando el comportamiento y la migración de esta especie con un claro objetivo, que es ayudar a recuperar su población, antes de que sea demasiado tarde.

Gracias el seguimiento de atún rojo (Thunnus thynnus) en el Mediterráneo a través de tecnología vía satélite y de marcas electrónicas externas (denominadas ‘pop-up’) en los peces, se ha podido saber que esta especie pasa mucho más tiempo en aguas de Baleares de lo que se pensaba. Ahora se conoce que permanecen en el norte de Mallorca durante el verano.

Este programa comenzó en 2008 con el seguimiento de 38 ejemplares (15 adultos y 23 jóvenes) lanzados en tres puntos diferentes: la costa norte de Cataluña, el norte de Mallorca y el Adriático central.

Pero, recuperar los atunes marcados ha sido muy complicado y tan solo han podido encontrar un ejemplar que estuvo ‘vigilado’ y en libertad durante 13 meses. Así se ha podido conocer datos de la temperatura del agua y la profundidad a la que se sumergen en distintos momentos del día.

Los investigadores son optimistas ya que exponen que a pesar de tener información a partir de este ejemplar, es la primera vez que se dispone de estos datos. Y aunque pueda parecer muy poco, es el atún mejor conocido de todo el Mediterráneo.

La pesca del atún rojo en España genera 2.300 puestos de trabajo (2.200 de pescadores artesanales y 100 ligados a la pesca industrial). Por ello, los científicos exigen la necesidad de proteger con urgencia las zonas de reproducción del atún que sufren sobrepesca.

Estos próximos meses serán claves para el futuro del atún rojo, cuya población se ha reducido en más de un 85% desde el comienzo de la pesca industrial, según cálculos científicos. En noviembre se celebrará una reunión en París dónde se espera que los Gobiernos se comprometan a adoptar las medidas propuestas para evitar la extinción de esta especie del Mediterráneo.

Vía | El Mundo