De granjas verticales a rascacielos sustentables

De granjas verticales a rascacielos sustentables

Escrito por: Leticia    20 julio 2009     2 minutos

Esta es la última tendencia en el urbanismo es ahorrar energía, para ello recolectan agua de lluvia y usan materiales reciclables para poder, de esta forma, respetar a la naturaleza .

En la última época el color verde parece que se puso de moda. No solo en la indumentaria sino también en la arquitectura de las grandes ciudades. Cada vez son más los ingenieros y arquitectos que tienen en cuenta el medio ambiente a la hora de imaginar, plasmar y construir edificios, casas y complejos.

En los últimos 10 años, la arquitectura ecológica, también conocida como diseño sustentable, bioconstrucción o eco urbanismo, dejó de ser una utopía para convertirse en una tendencia, y muy fuerte. En las maquetas, planos e ilustraciones de los diseñadores y arquitectos representantes de esta tendencia se aprecian las muchas características de este paradigma: ahorro de energía, integración al ecosistema, reciclaje de elementos, optimización de la iluminación y la ventilación natural, gestión ecológica de desechos, diseño armonioso, edificios sanos y granjas verticales.

Así por ejemplo, se habla de ‘viviendas de eficiencia positiva’ para denominar a las construcciones capaces de generar más energía de la que consumen; de ‘agricultura urbana’ para referirse a edificios ambientados para cultivar vegetales o de ‘techos verdes’, una nueva tecnología para cubrir tejados y terrazas de edificios con un manto vegetal vivo que, además de tener un alto valor decorativo y producir un buen aislamiento acústico, mejora del aire urbano al consumir dióxido de carbono y producir oxigeno.

La fiebre global por la ecología es tal que ha llevado a rediseñar de forma completa algunas ciudades para hacerlas ecológicamente amigables y también crear nuevas. Un ejemplo de esto es Masdar, en el Emirato Árabe de Abu Dhabi, que cuando se inaugure, en 2016 será la ciudad más ecológica del planeta, porque en ella no circularan automóviles y contará con un sistema de transporte de trenes magnéticos, estará orientada de noreste a suroeste para obtener un equilibrio óptico de luz solar y sombra, sus edificios no superan las cinco plantas y tendrá abundantes torres de vientos y paneles solares para ser autosuficiente energéticamente. Con una inversión de 22 mil millones de dólares, esta eco ciudad diseñada por el arquitecto estrella Norman Foster se extenderá por una superficie de 6.5 Km. cuadrados, espacio suficiente para unos 50.000 habitantes y 1.500 negocios que utilizarán casi un 75 por ciento menos de electricidad que otras ciudades del mismo tamaño.

Especulativos o avanzados, los proyectos eco arquitectónicos se multiplican respetando siempre el mismo principio: no chocar con la naturaleza.

Fuente | Arquitectura – Clarín

un comentario

  1. Àlex dice:

    ¡Impresionante!